miércoles, 6 de marzo de 2019

INDESCRIPTIBLE

Un derviche preguntó un día a otro derviche si había visto a Dios. Éste respondió:
«¿Cómo describirte lo indescriptible? Déjame contarte una historieta a modo de
respuesta. A la izquierda se encuentra un incendio y a la derecha un río de vino. Entre
la multitud de los hombres, los hay que tienden hacia el incendio y otros que se
embriagan en el río. Pero el bien y el mal están invertidos. Los que tienden la mano
hacia el incendio van a parar al río, mientras que los que se embriagan en el río son
arrojados al fuego. Un hombre de cada mil conoce este secreto y por eso eligen el
fuego tan pocos de ellos. ¡Los que se arrojan al fuego sin echar siquiera una mirada al
río de vino son favorecidos por la fortuna! La multitud, ebria del placer presente,
paga las costas de este juego. Y el fuego les dice: “¡Oh, ignorantes! ¡No os engañéis
sobre mí! ¡En verdad, soy una fuente, una fuente escondida! ¡Oh, Abraham! ¡No hay
aquí ni humo ni llamas si no son las de Nemrod! Si posees la sabiduría de Abraham,
el fuego será como el agua para ti. Sé como la mariposa atraída por el fuego”. Su
alma dice: “¡Aunque poseyese un millar de alas, las quemaría todas!”».
¡El ignorante siente piedad de mí por mi estupidez y yo tengo lástima de él
porque estoy en el secreto!

No hay comentarios:

Publicar un comentario